"No puedo ver a un niño sin sentir el deseo de catequizarle, de decirle cuánto ama a Jesús", decía san Marcelino de Champagnat. La consigna del fundador marista es la más repetida en la Hermitage Escuela de Educadores (HEE), una reunión en la que los profesores de los colegios de los Hermanos Maristas se empapan del espíritu de las escuelas donde trabajan. Y aseguran su puesto de trabajo. Dos docentes con contrato indefinido que impartían educación física y algunas asignaturas de primaria en los Maristas de Lugo, un colegio concertado, fueron despedidos la semana pasada por no asistir a estos cursillos religiosos. ( Ver más... )
Artículo de ARCADIO SILVOSA en El País - 15/07/2008
Enviado por Delegación FAPA "Siera de Guadarrama"